AGENCIALAVOZ.- Fernando Ñaupari, en un culto grabado en video, lee un pasaje bíblico que hace referencia a los “afeminados”, interpretándose que incita al odio. La organización boliviana de Travestis, Transgéneros y Transexuales Femeninas (OTRAF) de Oruro presentó una denuncia contra el pastor peruano Fernando Ñaupari en la Unidad de Lucha Contra el Racismo y Toda Forma de Discriminación por supuesta discriminación.
En un video grabado durante un culto de la iglesia evangélica, que sería la prueba del delito, el pastor lee un pasaje de la Biblia, la primera carta a los Corintios (6:9). “Dice el Señor: no sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios (…) ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los afeminados, ni los que se echan con varones”, y comenta “los homosexuales”.
Esta lectura del texto del Nuevo Testamento ha provocado el repudio de la OTRAF. Una de sus representantes, Brígida Ajata, declaró a ATB que este pastor “está haciendo declaraciones en contra de la población LGBTI, en contra de la población trans, nos está tratando de personas antinaturales, pecadoras… la Organización Mundial de la Salud a sacado de la lista de enfermedades mentales a la homosexualidad, a la transexualidad”.
La acción se produce en un contexto polarizado entre grupos evangélicos y colectivos LGBTI por normas que tienen que ver con el respeto a la diversidad de orientaciones sexuales.
En La Paz, el Consejo Nacional de Cristianos (CNC) anunció que presentará un recurso de inconstitucionalidad ante el Tribunal Constitucional y realizará una marcha el jueves.
LEY Y LIBERTAD DE EXPRESIÓN
La Ley 045 en la que se basa la denuncia indica que la persona que arbitraria e ilegalmente obstruya, restrinja, menoscabe, impida o anule el ejercicio de los derechos individuales y colectivos, por motivos de sexo, edad, género, orientación sexual e identidad de género, identidad cultural, filiación familiar, nacionalidad, ciudadanía, idioma, credo religioso, ideología, opinión política o filosófica, estado civil, condición económica o social (…) será sancionado con pena privativa de libertad de uno a cinco años.
El Consejo Nacional de Cristianos rechaza la vigencia para este caso de la ley municipal de promoción y respeto a las personas con diversa orientación sexual.